MARITZA BARRETO

viernes, octubre 31, 2008

VIÑA DEL MAR Y LISBOA







Lisboa. Los muros de las avenidas de Lisboa están resplandeciendo por el fulgor del sol. Lisboa de este año, semi vacía de gente a esta hora. Lisboa no hollada por mi paso y estampada de ausencias. No habrá paz hasta no llevar a cabo la misión: el reencuentro con la tierra añorada. Lisboa antigua…
Ya viene el alba a mi ventana. Ya mi Pacífico y su cielo dejarán de ser este oscuro pozo. Ya la luz del día les devolverá sus líneas y sus colores.
Los pelícanos de Lisboa tomaran sus sitios en sus rocas para contemplar su poniente, mientras el sol se les irá escondiendo detrás de mis montañas… en Viña del Mar


Maritza Barreto

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